Trabajadoras de la maquiladora Top Jean salen de la planta al terminar su jornada laboral.
Angélica posa para un retrato junto a las máquinas de coser que le dieron como indemnización tras su despido.
Una mujer ajusta una pieza de ropa a la máquina de coser en un taller donde se confecciona material sanitario.
Taller en Santa Ana Teloxtoc, a 60 km de Tehuacán, donde confeccionan ropa médica.
La carretera que sale de Tehuacán y lleva a Santa Ana Teloxtoc, un barrio marginal donde viven algunas maquileras.
Martín Barrios, activista por los Derechos Humanos y laborales en el Valle de Tehuacán.
Una mujer trabaja en un taller familiar rodeada de sus hijos ya que no van a la escuela por la suspensión de clases por la emergencia de la Covid-19.
Muchas maquileras despedidas ahora cosen material sanitario desde sus casas.
Esta trabajadora recibe un dólar por cada 55 mascarillas que hace
Tehuacán, territorio que a finales de 1990 fue considerado la capital mundial de los blue jeans, por el auge de sus maquiladoras de mezclilla que fabricaban prendas de prácticamente todas las marcas globales, como Levi’s, Calvin Klein, Guess y Tommy Hilfiger.
Sin embargo, reconoció que esta actividad, que colocó a la ex capital mundial de los blue jeans como la principal proveedora de mascarillas a nivel nacional, generó un ingreso mucho menor que el de la confección de prendas de vestir.
El movimiento alrededor de las fábricas inicia a partir de las 7:30, cuando el personal empieza a arribar a los centros de trabajo que, en algunos casos, carecen de insignia que los identifique.
empresa dedicada a la fabricación de prendas de mezclilla para la marca estadounidense True Religion se declaró en quiebra, dejando sin empleo a unas 300 personas, en su mayoría mujeres.
Cerca del 40% del personal de las maquiladoras de confección instaladas en el municipio fue despedido por el cierre de varias empresas, según la Cámara de la Industria del Vestido en Tehuacán.