El bordado, sintetiza María, de la comunidad tsotsil de Acteal, se relaciona con el territorio porque “ahí están las plantas, los gusanos, las abejas y las mariposas en las flores. Nosotras copiamos de la naturaleza. Por eso, si la destruyen, nos destruyen a nosotras”. Coinciden con ella las tejedoras ikoots de San Mateo del Mar, de la costa de Oaxaca, y las hilanderas del pueblo ñomndaa de Suljaa’, de la montaña de Guerrero.
Presentamos en este Especial la historia de tres colectivos de mujeres de distintos pueblos originarios, la relación de sus hilados ancestrales con el territorio amenazado; los retos de su organización autónoma; su quehacer cotidiano que empieza con las primeras horas del sol y termina al anochecer; la discriminación que enfrentan con el regateo en la venta de sus textiles; su estrecho vínculo con la tierra, el maíz, las flores, los animales, la montaña, el mar, el río y todo lo que las rodea.
Desinformémonos cumple 13 años, y con este hilado de historias celebra la vida que, desde los tejidos de las mujeres de los pueblos, se defiende porque, dicen, “aquí y así nos gusta vivir”.